martes, 19 de mayo de 2009

San Francisco Ballet

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La compañía profesional de ballet más antigua de Estados Unidos ha emergido como una organización artística de clase mundial desde su fundación con el nombre de San Francisco Opera Ballet en 1933. Inicialmente su propósito principal era entrenar bailarines para su aparición en fastuosas producciones de ópera de larga duración. Nunca he visto en vivo a esta compañía, pero con lo que he visto en videos y TV no necesito verla en directo para afirmar que es una de las grandes, uno de los mejores ballets del mundo.
William Christensen llegó en 1938 y coreografió la primera producción de larga duración de la compañía: Coppélia, al año siguiente. En 1940, montó la primera producción de El Lago de los Cisnes. En Nochebuena de 1944, Christensen hizo el lanzamiento de una festiva tradición nacional con la premiere del Cascanueces, la primera versión completa del ballet presentada en los Estados Unidos. En 1942 la Compañía se convirtió en una entidad totalmente separada de la ópera y fue renombrada San Francisco Ballet. Willam Christensen era el director artístico y su hermano Harold fue designado director de la San Francisco Ballet School, cargo que retuvo durante 33 años. Lew Christensen, primer bailarín de Estados Unidos, se unió a Willam como co-director en 1951 y se hizo cargo de la Compañía el año siguiente. Bajo la dirección de Lew, la Compañía hizo su debut en la Costa Este en el Jacob’s Pillow Dance Festival en 1956 y una gira por 11 países Asiáticos el siguiente año, marcando las primeras presentaciones de una compañía de ballet Americana en el Lejano Oriente.
En 1972, después de presentarse en diversos teatros de San Francisco, la Compañía se estableció permanentemente en la War Memorial Opera House. Al año siguiente, Michael Smuin fue designado director artístico asociado y celebró su nueva sociedad con Lew Christensen colaborando en una producción de larga duración de Cenicienta. Otras grandes producciones de Smuin fueron Romeo y Julieta y The Tempest, el primer ballet transmitido en vivo desde la War Memorial Opera House y nominado para 3 Premios Emmy (Willa Kim recibió el premio por Diseño de Vestuario Sobresaliente). Tres años después, Smuin recibió un Premio Emmy por la Coreografía de “Great Performances—Dance in America” transmisión nacional de A Song for Dead Warriors.
En 1974 el San Francisco Ballet se enfrentó a la bancarrota, pero sus partidarios y la comunidad respondieron con un extraordinario esfuerzo local llamado “Salve a Nuestro Ballet,” que exitosamente sacó a la Compañía del problema. Ese mismo año, el Dr. Richard E. LeBlond, Jr. fue designado presidente y director general de la San Francisco Ballet Association, desarrolló el primer plan a largo plazo para una compañía de danza Estadounidense y en 18 meses el San Francisco Ballet se encontraba financieramente en números negros.

La llegada de Helgi Tomasson como director artístico en Julio de 1985 marcó el comienzo de una nueva era para el San Francisco Ballet. Al igual que Lew Christensen, Tomasson había sido por muchos años bailarín principal del coreógrafo de ballet más importante del siglo XX: George Balanchine. Antes de dos años de la llegada de Tomasson, el San Francisco Ballet develó su cuarta producción del Cascanueces durante la Temporada de Repertorio No. 54 de la Compañía. Tomasson desde entonces ha montado aclamadas producciones de larga duración de muchos clásicos, incluyendo El Lago de los Cisnes (1988); La Bella Durmiente (1990); Romeo y Julieta (1994); Giselle (1999); Don Quijote, en colaboración con el antes Bailarín Principal y actual coreógrafo residente Yuri Possokhov (2003); y un nuevo Cascanueces (2004).

En 1991 el San Francisco Ballet se presentó en Nueva York por primera vez en 26 años, regresando en 1993, 1995, 1998, 2002 y 2006 para el primer compromiso de la Compañía en el Lincoln Center Festival. Después de la primera gira, The New York Times proclamó: “El Sr. Tomasson ha logrado algo sin precedentes; llevó a una compañía regional a clasificaciones nacionales, y lo ha hecho perfeccionando a los bailarines dentro de un estilo clásico de brío y pureza asombrosos. Bajo el liderazgo de Helgi Tomasson, esta es una de las espectaculares historias de éxito de las artes en Estados Unidos.”

El San Francisco Ballet continúa enriqueciendo y expandiendo su repertorio, presentando aproximadamente 100 funciones anualmente. El vasto repertorio de la Compañía incluye trabajos de Sir Frederick Ashton, George Balanchine, August Bournonville, Christopher Bruce, Val Caniparoli, Lew Christensen, Nacho Duato, Flemming Flindt, William Forsythe, James Kudelka, Jirí Kylián, Lar Lubovitch, Agnes de Mille, Sir Kenneth MacMillan, Hans van Manen, Peter Martins, Mark Morris, Rudolf Nureyev, Marius Petipa, Roland Petit, Jerome Robbins, Paul Taylor, Antony Tudor y Christopher Wheeldon.













En años recientes el programa de giras de la Compañía se ha vuelto crecientemente ambicioso. En particular, la Compañía ha desarrollado fuertes relaciones con varios centros domésticos de artes escénicas incluyendo el John F. Kennedy Center for the Performing Arts en Washington, D.C.; el New York City Center y el Southern California’s Orange County Performing Arts Center. También ha realizado giras más frecuentes al extranjero, incluyendo compromisos con prestigiosas sedes como el afamado Opéra de Paris-Palais Garnier en Paris (2001); el Sadler’s Wells Theatre (1999, 2004) y la Royal Opera House en Covent Garden (2002) en Londres; el Teatro Megaron en Atenas (2002); el Dorothy Chandler Pavilion en Los Angeles (2003) y el Edinburgh International Festival en la Edinburgh Playhouse (2003).De la presentación de la Compañía en Londres en 2004, David Dougill de The Sunday Times escribió: “La sobresaliente dirección artística de Helgi Tomasson (ahora en su año número 20)…ha transformado una compañía regional Estadounidense en una de las mejores compañías de ballet del mundo.”
En 2005 la Compañía regresó a Paris, participando en Les étés de la danse de Paris, un nuevo festival de danza realizado en exteriores en el distrito Marais de Paris. Como parte del repertorio de tres programas, el San Francisco Ballet presentó trabajos comisionados de los coreógrafos aclamados internacionalmente Lar Lubovitch, Paul Taylor y Christopher Wheeldon.
En 2004, el San Francisco Ballet fue la primera compañía de ballet Estadounidense en presentar la obra de larga duración Sylvia, con coreografía totalmente nueva de Mark Morris. La Compañía también realizó la Centennial Celebration, una celebración de dos semanas, en honor del centenario del nacimiento del Coreógrafo Maestro George Balanchine. En diciembre de 2004, el San Francisco Ballet estrenó la nueva producción de Tomasson del Cascanueces, aclamada por The New York Times como “…sorprendente, elegante y hermosa.”

En 2005, a Tomasson le fue otorgada la prestigiosa medalla Lew Christensen Medal en honor de su vigésimo aniversario como director artístico del San Francisco Ballet, y ese mismo año la Compañía ganó su primer premio Laurence Olivier Award, por su temporada de otoño de 2004 en el Sadler’s Wells Theatre.

En 2006, en una encuesta realizada a lectores conducida por la revista Dance Europe, el San Francisco Ballet fue la compañía no Europea más votada como “Compañía del Año”. En 2008, el San Francisco Ballet celebró su aniversario número 75. La Escuela del San Francisco Ballet, supervisada por Tomasson, atrae estudiantes de todo el mundo, entrenando un promedio de 350 anualmente. Además de engrosar las filas del San Francisco Ballet, los graduados se han incorporado a distinguidas compañías de ballet en todo el mundo.

Isaac Hernández, uno de nuestros orgullos mexicanos de la danza, se convirtió rápidamente en bailarín principal de esta gran compañía, a la cual se incorporó en 2008 y de quien se han leído muy buenos comentarios en las críticas internacionales.